El pastel que os presento hoy, es una receta muy sencilla, fácil de preparar y que además es muy socorrida. Se puede presentar como plato único acompañado de una ensalada, o bien, como entrante o aperitivo cortándolo en porciones más chiquitas.
Lo mismo puede tomarse caliente que frío, por lo que, lo hace ideal para dejarlo preparado con antelación y así poderlo llevar por ejemplo: de picnic, a cualquier reunión con amigos y familiares, para los días de playa, o bien para todos aquellos a los que el tiempo siempre se les echa encima.
Ingredientes para 4 personas: Siguiendo una dieta equilibrada de 1500 calorías diarias
2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra.
250g de cebolla picada
240g de champiñones fileteados
3 Dientes de ajo picados
95g de Panko (pan rallado japonés)
¼ De taza de caldo de pollo (o cacito de caldo Knorr disuelto en agua)
3 Cucharadas de cilantro o perejil
1 Cucharada sopera de salsa de soja o salsa para wok
1 Cucharada sopera de salsa Worcestershire
Pimienta negra molida
400 grs. Carne picada de pavo ( podéis ponerle pollo o bien mezcla de las dos)
1 Huevo ligeramente batido
Sal
½ Taza de salsa de tomate
1 cucharada de extracto de tomate
1 Cucharada de azúcar moreno
1 Cucharada de mostaza
Nuez moscada (al gusto)
Elaboración
Precalentar el horno a 180º C
En una sartén grande calentar el aceite, pochar la cebolla y los ajos un poco, cuando la cebolla esté transparente añadir los champiñones y salpimentar.
Retirar del fuego y dejar enfriar unos minutos.
Combinar los champiñones con el panko y los 8 ingredientes siguientes en un bol grande y mezclar bien.
En otro bol aparte mezclar el extracto y la salsa de tomate con el azúcar moreno, la mostaza y la nuez moscada hasta que todo quede bien integrado.
Poner la mezcla de la carne en el molde engrasado anteriormente y cubrir con la mezcla de salsa de tomate.
Hornear por espacio de 40 minutos.
Y dejar reposar 10 minutos antes de servir.
